Hace algunos años comenzó a gestarse una nueva corriente que promete transformar los recursos humanos a partir del uso de juegos en entornos no lúdicos
Buscar trabajo es un proceso a veces estresante. Las entrevistas estandarizadas, exámenes psicotécnicos, las preguntas de rutina son algunas de las prácticas que caracterizaron el proceso de selección de personal.
Sin embargo, el avance de la tecnología y herramientas de inteligencia artificial (IA) están moldeando un nuevo escenario. Desde las áreas de recursos humanos aprovechan las innovaciones para cambiar cambiar la forma en que interactúan con su personal y con los posibles candidatos.
En este camino comenzó a gestarse una nueva corriente para transformar la selección de postulantes a partir del uso de juegos: la gamificación. Se originó inicialmente en la industria de los medios digitales y su definición más simple es el uso de elementos de juego en contextos no lúdicos.
La gamificación brinda a las empresas un desarrollo de rendimiento y productividad en el que se combinan la psicología, motivación y el diseño para mejorar comportamientos en cualquier área. Además, permite aumentar la participación a través de estrategias online y offline.
«La gamificación no solo hace que el proceso de contratación sea extremadamente atractivo para quienes buscan empleo, sino que los juegos basados en pruebas cognitivas ayudan a las empresas e instituciones a abordar el gran problema de la falta de talento, mostrando quiénes lo tienen», afirma a iProUP Noelia Aguirre Fernández, CEO de Robin, una nueva plataforma enfocada a evaluar personas a través de juegos de neurociencias apoyados por tecnología de inteligencia artificial.
Parte de su éxito se debe en el proceso, en el que la diversión y la creatividad se unen para mejorar la experiencia, gracias a la integración de diferentes estrategias en entornos no lúdicos, cuyo principal objetivo es motivar y hacer más ameno el trabajo de los empleados de una empresa.

Sin sesgos

Este tipo de plataformas, apalancadas en inteligencia artificial y la ciencia de datos, abren la puerta a una nueva era en la cual las decisiones sobre el personal no están influenciadas por la percepción humana, sino que se apoyan en su totalidad en los algoritmos.

Esto promete –al menos, en teoría– generar oportunidades a los postulantes de ser evaluados por sus capacidades reales, aquellas que les facilitan el aprendizaje y desaprendizaje, como el pensamiento crítico, memoria y atención, además de disminuir la subjetividad de los datos requeridos, como lugar de residencia, foto, género, edad o niveles de estudio.
«El hecho de que alguien haya trabajado en determinada compañía o posea determinado cargo no es para nada predictivo de su futuro desempeño. La medida más acertada de job performance proviene de la detección y competencias cognitivas», asegura Aguirre Fernández.
La empresa Robin afirma que el uso de CV ha entrado en su ocaso y que el proceso tradicional de selección está totalmente obsoleto. Para cambiar este paradigma, creó una plataforma lúdica que se enfoca en la experiencia del candidato.
A la hora de evaluar un candidato, externo o interno, se le presentan distintos desafíos en formato de juegos cortos –de no más de tres minutos– para medir las competencias no tradicionales y cognitivas, como la atención y la inteligencia. Luego, la herramienta de IA se encarga de traducir esta información en datos al instante.
«Lo interesante es que puede hacerse una búsqueda con un ‘empleado modelo’ para luego tratar de dar con candidatos que tengan skills similares, sin sesgos de género, edad o lugar de residencia», agrega. La plataforma también arroja un completo reporte que especifica las fortalezas, habilidades y puntos destacados de los postulantes.
Con un equipo que se apoya en la neurociencia y tecnología, la firma ya trabaja con compañías del calibre de ICBC, Galicia Seguros y Vittal, identificando en los postulantes las habilidades cognitivas y emocionales.
La compañía planea facturar más de u$s6 millones en 2020 y prepara su expansión a toda la región gracias a la inyección de capital de Globant.

Una aventura al trabajo

En la misma línea, Javier Krawicki y Horacio Llovet, fundadores de las plataforma TuPrimerLaburo, lanzaron Nawaiam, una herramienta lúdica que, adoptando tecnología de forma creativa y apoyándose en la inteligencia artificial utiliza un entorno de videojuego para la generación de perfiles profesionales de los jugadores.
«Este proceso nuevo permite que buscar trabajo ya no esté cargado de stress. Además, gracias al formato se pueden hacer miles de entrevistas en simultáneo, tener resultados al instante e incluso dar una devolución al postulante con información detallada y precisa», asegura a iProUP Krawicki.
Así, el postulante descarga el juego en su celular, que consiste en una aventura épica contemporánea en la que se pone en el rol de héroe. Allí, debe tomar decisiones que irán moldeando sus resultados.
«Esta evaluación da información objetiva y genuina, además de que no representa un mal momento para los entrevistados», asegura el fundador de la firma, quien indica que la prueba no dura más de 15 minutos.
El desarrollo contó con un equipo técnico para la creación de las mecánicas jugables y los algoritmos que analizan los resultados, además de un diseño propio y un guión de Javier Beltramino, productor de películas como «Relatos Salvajes», «El Clan» o «Papeles en el Viento».
«Esta solución ofrece a las empresas un panel de control (dashboard) personalizable y absolutamente dinámico, que les permitirá generar ponderaciones ideales para los perfiles buscados, y filtrar y gestionar la información obtenida a través del videojuego. Todo esto, de forma casi inmediata, agilizando los procesos y garantizando los mejores resultados, devolviendo instantáneamente los perfiles que más se adapten a la búsqueda», resalta Krawicki.

Para realizar el desarrollo, Nawaiam contó con una inversión propia de u$s300.000, ya tiene acuerdos cerrados con compañías como el Banco Industrial. Planea lanzar la solución en Argentina, Chile y España, y superar el  millón de dólares de facturación en 2020.
Además, la compañía le vende «créditos» (cada uno equivale a una partida y un reporte) sus clientes para que puedan usar en sus candidatos internos y externos. «Buscamos ser una solución simple, rápida y pragmática», finaliza el vocero.

Diversión

Más allá del modelo de gamificacion que proponen Robin y Nawaiam, esta tendencia «relajada» del área de trabajo se está replicando en otro tipo de empresas. Por eso, la firma gA desarrolló un programa que empezó como un proyecto interno, pero que se convirtió en un servicio que vende a terceros.
Back to Fun es la nueva plataforma que busca acelerar y facilitar la adopción del cambio en las compañías, potenciando resultados a través de herramientas digitales. Su objetivo es aumentar la motivación y la lealtad de los empleados, utilizando recursos lúdicos en tareas cotidianas.
«‘¿Qué te divertía cuando eras chico?’. Eso es lo primero que nos preguntamos a la hora de comenzar con un cliente. La idea es integrar el juego al trabajo. Nuestro principal diferencial es la facilidad de integrar cada parte con los sistemas de la compañía, logrando autonomía para seguir avanzando y jugando», expresa Alejandro Breuer, consultor en Seguridad Informática de gA y uno de los ideólogos de este producto.
Esta herramienta facilita el trabajo basado en experiencias atractivas para aumentar el rendimiento, la interacción entre equipos y el compromiso interno. Alineada con los objetivos de cada compañía, ayuda a atravesar cada proceso a través de motivaciones que nacen de juegos y actividades. De esta forma, los colaboradores y equipos avanzan en el alcance de nuevas metas alineadas al negocio o a un área específica.
«La primera vez que entrás, te pide un avatar. Después vas viendo las misiones, que transforman las tareas más burocráticas y aburridas en desafíos a completar. Cuando los usuarios las completan, ganan puntos que pueden canjear por objetos virtuales o premios como mochilas, mouses y auriculares», agrega Andrea Iglesias, Consultora de gA.
Esta solución a partir de entender a las nuevas generaciones que ya comenzaron a desembarcar en el mercado laboral, muy marcadas por la industria de los videojuegos, las recompensas frecuentes, los estímulos constantes y la necesidad de generar engagement.
«Así podemos potenciar, motivar reconocer el trabajo de todos los días, como también enfrentar cambios profundos en las compañías que suelen ser complejos de llevar adelante», finaliza Breuer.